miércoles, 15 de abril de 2009

Juegos de deporte y simulación ¿Son éticos?

Tema de debate entre los jugadores de juegos basados en situaciones irreales, como guerras ficticias, fantasía medieval, plataformas u otros tipos de géneros en los cuales realizas acciones fuera de lo mundano y los fanáticos de la simulación y deportes virtuales.

Los títulos de deporte son la fascinación de muchos, por no decir una aplastante mayoría (sujeto a corroboración), no es raro ver algún título de éstos entre los tres mejores vendidos. Muchas páginas dan notas muy altas a títulos como estos, pese a que rompen una de las reglas básicas, o sea, no ser monótonos. Prácticamente harás lo mismo una y otra vez hasta que se rompa otra regla, la de no sacar títulos anuales ¿les suena FIFA, MADDEN NFL, PRO EVOLUTION SOCCER o NBA LIVE? No son más que meras actualizaciones de estadios, jugadores, copas y gráficos. La originalidad no es algo que destaque en estos títulos. Les aviso que tan solo de pura casualidad reseñaremos juegos de esta índole, pues su análisis correcto por la razón anterior se hace casi imposible, debido a la falta de capacidad de comparación.

Los títulos de simulación son locura de una minoría, pero entran en el asunto de todos modos. Son conocidos por los juegos de simulación de vuelo, de caza, conducción y más recientemente añadido, guerra (únicamente de parte de Bohemia Interactive y sus “juegos serios”). No se destaca tampoco demasiada originalidad aquí, pero sus títulos buscan superarse añadiendo nuevos y más reales motores de física, Opciones más abiertas, reacciones reales de IA y efectos climáticos, encontrarán reseñas nuestras de títulos como estos, si existe una base de comparación y estructuras cambiantes de título en título.

Algunos dirán “Bien ¿Y qué con todo esto?” Bueno, resulta que no se considera ético jugar virtualmente a algo que podrías hacer en la vida real, como cazar, jugar football, tennis, baseball, etc. O sea ¿Resulta ético simular estas cosas? ¿Es necesario? La verdad, yo no estudio para pilotear un avión, pero si se me antoja puedo instalar Flight Simulator en mi computadora, así como tampoco me agrada la idea de matar animales, pero la caza es divertida, instalo Cabbela’s Hunnting, no creo que jamás forme parte de la selección de football de mi país, instalo FIFA, y no crean que ni por error participaría de una guerra, pero ahí está Operation Flashpoint.

Me parece perfecto que se intente simular virtualmente la realidad, digo es la razón de ser de los juegos, experimentar cosas. Yo nunca cacé en mi vida, ni participe de una guerra, ni jugué un partido de football en un estadio de 100000 personas.

Pero imaginen esto: Un padre pasa por el living de su casa y ve a su hijo jugando con su consola a un título de deportes, se pone a pensar que ya hace una semana que está jugando ese juego aproximadamente como tres o cuatro horas diarias y en horarios de sol ¿Qué razón tiene el niño para no salir a jugar con sus amigos al deporte en sí? Porque es común que cuando se reúne con sus amigos jueguen a eso también, al videojuego. Es absolutamente innecesario. No estamos halbando de experimentación real ahí. Por lo cual los ataco, pero los defiendo al mismo tiempo por lo dicho en el párrafo anterior.

Este no es un tema que se pueda determinar con un sí o un no, pero para los que los critiquen me gustaría que me dijeran si nunca se emocionaron cuando un juego queda muy real. Porque a mi no me agradaría que flight Simulator me dejará girar sobre mí mismo sin caerme, pues muchas veces los juegos nos divierten solo por como representan muy bien la realidad. Recuerden cuando salio Half Life 2 con su motor de física (aunque HL2 no tenga nada que ver), todos lo amaron y sin embargo ese motor simula la realidad, así como sus gráficos. Porque no debemos olvidar que eso son los juegos, mundos virtuales, que buscan parecerse a la realidad, y nos gustan así.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Calidad, cantidad y excelente sabor!
El tema que vos jugás a cosas como space sirens 2! eso sí que es REALIDAD VIRTUAL! jajajaja
Y un factor demasiado simple es que todo en exceso es malo, es decir, si tas todo el día jugando sos un enfermo de la mente, si jugás pa pasar un buen rato, está bien, hay que separar entre darse un gusto y depender de las cosas.
Cero calidad...

Diego